¿Cómo protegemos los humedales de San Cristóbal de Las Casas?

La relación entre la humanidad y los humedales, es tan antigua como la necesidad de las primeras civilizaciones por establecerse lo más cerca posible a las fuentes de agua.

En este sentido, cada sociedad desarrolla estrategias propias para convivir con la dinámica hidrológica natural de un territorio. Sin embargo, el avance de la tecnología, el incremento demográfico y el crecimiento anárquico de las ciudades han propiciado una alteración profunda, tanto de los cuerpos de agua como de los ecosistemas que se forman alrededor de ellos: los humedales.

La ciudad de San Cristóbal de Las Casas no ha sido ajena a este proceso. Hoy día, los humedales confinados al interior de este centro urbano sufren grandes y graves afectaciones: contaminación, reducción, fragmentación así como perdida de bienes y servicios ambientales.

Si bien la fundación de la antigua ciudad de Villa Real (1528) implicó una afectación directa al ecosistema original, no fue sino hasta la construcción del túnel artificial (1973) que la dinámica hidrológica del Valle de Jovel cambió sustancialmente y, con ello, las condiciones naturales que promovían el desarrollo de humedales.

Humedal La Kisst San Cristóbal de Las Casas. Foto: Comunicación Social SAPAM

Humedal La Kisst San Cristóbal de Las Casas. Foto: Comunicación Social SAPAM

Empero ¿cuánto y/o que superficie de humedal se ha perdido, transformado y/o alterado? La respuesta aún es incierta por dos factores principales. El primero de ellos es que aún no existe un consenso sobre los criterios para la delimitación de un humedal. Si no podemos reconocer los límites de un humedal, ¿cómo podemos estimar las superficies que éstos ocuparon y ocupan actualmente?

El segundo factor: existe una tendencia “tradicional” por reconocer como “humedal” solo a aquellas superficies de amplia extensión con vegetación típica de estos ambientes, ya sea enraizada emergente, enraizada sumergida o libre flotadora. Pocas veces se reconocen las comunidades de humedal asociadas a ríos, arroyos, manantiales, dolinas, así como los ambientes donde la columna de agua subterránea es lo suficientemente superficial para generar comunidades de plantas y animales adaptadas a periodos prolongados de humedad.

Para poder generar planes efectivos para la protección, restauración, rehabilitación y/o saneamiento de los humedales de San Cristóbal de Las Casas, es de vital importancia definir el marco conceptual y técnico para el reconocimiento y delimitación de todos los tipos de humedal presentes en la cuenca; identificar las relaciones ecológicas entre ellos y establecer políticas públicas acordes a la complejidad ambiental del Valle de Jovel.

La “Kisst” y Lagos de “María Eugenia” son las dos extensiones más amplias y representativas de los humedales que alguna vez existieron en la cuenca. Sin embargo, no son las únicas. Su salud y permanencia depende del adecuado funcionamiento y conectividad con otros tipos de humedal que aportan al sistema agua nutrientes, semillas, fauna, y todo tipo de materiales necesarios para su mantenimiento.

Todos los tipos de humedal de la cuenca de San Cristóbal juegan un rol importante en la regulación del microclima local, el control de inundaciones, la recarga de acuíferos, así como hábitat de una gran variedad de especies florísticas y faunísticas. Por eso, abogamos por una visión integral de las acciones y propuestas orientadas a su conservación.

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